El Gobierno nacional y las concesionarias de las líneas
Belgrano Norte y Urquiza, Ferrovías y Metrovías, están en tratativas
para negociar su continuidad más allá del vencimiento de sus contratos, previsto para el 1° de abril de 2018 y para el 1° de enero de 2018, respectivamente.
En julio del año pasado, mediante la resolución 182/16, el Ministerio de Transporte creó la Comisión Especial de Renegociación de Contratos, cuya instalación había sido dispuesta por el artículo 3° de la ley 27.132 de Ferrocarriles Argentinos, aprobada en 2015.
Sin embargo, bajo la presidencia de Orfila, la SOFSE está urgida por el Gobierno a volv
erse menos dependiente del fisco, embarcada en proyectos comerciales que poco tienen que ver con lo ferroviario y dista de querer sumar más ramales para operar. La demora en la transferencia de los servicios de Ferrobaires,
otra de las concesiones que revierten al Estado en el marco del art. 3°
de la ley 27.132, es sólo una muestra de esta situación.
El Gobierno no ve con malos ojos mantener a los privados, siempre
y cuando se flexibilicen los contratos para favorecer el acceso abierto
a la red, algo que preocupa especialmente en el caso de las cargueras
NCA, FEPSA y Ferrosur Roca, que hasta el momento continúan con el manejo
exclusivo de la infraestructura concesionada.
Por estas razones, en realidad, la labor de la comisión se centra en
estudiar las alternativas legales que permitan la continuidad de los
concesionarios. Los contratos de Ferrovías y Metrovías
contemplan la posibilidad de realizar una simple prórroga, pero lo
cierto es que la ley 27.132 excluye esa alternativa al obligar a
su adaptación al nuevo marco normativo, que no permite concesiones
integrales como las otorgadas en la década de 1990. No obstante, la
decisión final recae en la comisión.
Otra solución que se evalúa, si finalmente la comisión resolviera que
esas líneas deben volver al Estado (la infraestructura a la ADIF y la
operación a la SOFSE), es la posibilidad de establecer un
acuerdo de operación que le permita a Ferrovías y Metrovías seguir
operando los servicios, aunque por cuenta y orden de SOFSE. Esta última, que no sería más que una concesión light a la manera de la que Metrovías tiene en el Subte porteño –y que vence a fines de este año– o a través de la que Casimiro Zbikoski opera el servicio internacional Posadas – Encarnación, es la alternativa que más suena hoy por los pasillos de Transporte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario